ARTEFACTO INC, una apuesta por el arte y la sociedad
Por: Lina Marcela Gallego Moreno
Los juguetes no solo divierten; también son creaciones que forman parte del aprendizaje en niños y adultos. Así lo descubrió el docente Iván Darío Espinel Cruz, el creador de Artefacto Inc, una empresa que mediante juguetes invita a la reflexión social, a la construcción del conocimiento y a la investigación en diseño.
Iván Darío Espinel no es un diseñador gráfico común. Decidió buscar un factor diferencial y encontró en la juguetería un espacio para dejar volar su imaginación, experimentar y, sobre todo, enseñar. «Como todos, cuando yo estaba en la universidad no sabía exactamente en qué me iba a desempeñar y entré a trabajar en una empresa que inyectaba juguetes promocionales en alimentos y al tiempo descubrí una tendencia en Hong Kong y Estados Unidos de los Art Toys (juguetes de diseñador).
Se trataba de figuras coleccionables y, en algunas ocasiones, exclusivas, creadas por un diseñador. Ahí descubrí una oportunidad y empecé a soñar con hacer una producción en casa», cuenta Espinel.
Y es que pocas personas en el país se dedican a la construcción y fabricación de juguetes. Según un estudio sobre las oportunidades de este sector en Colombia, realizado por la Embajada de España en 2005, la mayoría de empresarios del país desconocían en esa época el peso de la juguetería en la economía nacional. De hecho, tampoco tenían cifras agrupadas de los productores o comercializadores; solo notaban esfuerzos individuales por hacer rentables las empresas que intentaban estar en este negocio.
Esa escasez de interesados motivó al diseñador Espinel a crear en el 2012 una marca de juguetes artísticos (Art Toys). La llamó Artefacto Inc y con esta más que ganar dinero se propuso establecer una plataforma educativa y una comunidad de pensamiento.
«La comunidad es lo más importante, porque es una oportunidad para crear espacios propicios para el aprendizaje como talleres formativos, charlas, creaciones de experiencias sobre ilustraciones, diseños editoriales y diferentes procesos de animación alrededor de los juguetes», explica el diseñador.
Además, enfatiza que los juguetes son un crisol de conocimiento con los que se puede poner en práctica cualquier saber; y lo importante no es el objeto en sí mismo, sino el ecosistema que se crea alrededor de él.
Por ejemplo, hace poco simbolizó, con la colección de juguetes llamada Terror criollo, diez personajes de la cultura popular colombiana, entre los que están Marcelino Rodríguez «Mandíbula» o Gloria Zapata «Doña Gloria» la del Metrocable. Fueron toda una sensación entre los compradores. También en pandemia hizo una colección enfocada en la Primera Línea, en el marco de las protestas del Paro Nacional del 2021, con el fin de hacer una reflexión sobre el tema y cambiar paradigmas. En esta colección creó seis personajes; se trató de los héroes anónimos que fueron fundamentales en la construcción de tejido social; un ejemplo claro, la mujer del Valle del Cauca, que cocinaba tanto para los manifestantes como para los militares.
«Trato de no hacer grandes producciones. De ser puntual para no sobresaturar el mercado. Por ejemplo, cuando inicié hice una pequeña producción de veinte juguetes. Era un chamán murciélago precolombino, con superficie en blanco, que la gente lo podía personalizar y ahí, sin duda, se volvía una plataforma artística. Fueron vendidos exitosamente», recuerda Espinel.
En estos diez años el camino no ha sido fácil para él: «Siempre que cuentas la idea o el proyecto aparecen los no, la desconfianza; te dicen que nada funcionará, pero hay que ser muy terco y explorar. Es un proceso de paciencia», puntualiza.
En su caso, se unió al colectivo internacional Art Toy Gama conformado por jugueteros de Hong Kong, España, Chile, Estados Unidos y Colombia. Adicionalmente, tiene un taller en Medellín en el que ha elaborado más de cuatrocientos juguetes que, en su mayoría, reflejan un punto de vista sobre alguna temática de interés público del país.
Ahora, se puso el reto de hacer más conocido el mundo de los jugueteros independientes. Según el diseñador, aunque el crecimiento en los últimos años es exponencial, los fabricantes aún son escasos. En Medellín, indica que solo hay unas doce personas que se dedican a esa labor. Por eso, proyecta su empresa como una posibilidad para mostrarle a otros emprendedores que sí es posible conformar negocios de este tipo y ayudarles en el arduo proceso de consolidación.
Una colección que sabe a aguacate
Con la técnica de rotomoldeo, Iván creó la nueva colección de Artefacto INC que cuenta con una producción de doscientos setenta figuras y su concepto se basa, especialmente, en el aguacate. Este se considera el producto más popular de la empresa, gracias a la buena aceptación por parte de sus clientes. Además de que incentiva el apoyo a los jugueteros locales que elaboran productos novedosos y de calidad.
La idea de crear un juguete inspirado en el aguacate tiene como contexto todo lo que gira en torno a este fruto tan popular y apetecido en el país. Espinel cuenta que la idea surgió luego de recibir la visita de una amiga del exterior que le habló del tema y le preguntaba dónde conseguirlos: «Así que vi documentales de aguacates en México y Chile. También observé la problemática que generaban los aguacates al agua y, tristemente, su relación con el narcotráfico y otro montón de cosas alrededor. Entonces pensé, qué bueno sería poder llevar un juguete con la temática del aguacate al mercado». Fue así como esta figura llegó a la venta y tuvo una gran acogida. Creó un proceso de mercadotecnia con este juguete y lo ha llevado a otros productos como zapatos, stickers y camisetas.
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